lunes, 4 de febrero de 2013

Te aspiré con humo bajo las luces del patio, solíamos reír hasta que nos ahogamos en las noches perdidas. Fue el mejor momento de mi vida, pero ahora duermo solo. Así que, querida, no me despiertes, porque mi emoción se ha ido (di que me equivoco). En el atardecer tornándose rojo detrás del humo, para siempre y solo.
Te fuiste y me cosiste a esta cama, el sabor tuyo y mío nunca dejará mis labios, debajo de la lluvia cegadora. Quiero tomar tu mano tan fuerte que voy a romper mi muñeca, y cuando los buitres canten esta noche me uniré a ellos.
Cantaré con ellos porque no conozco ninguna otra canción. Cantaré con ellos, pero apenas puedo sostenerme. Para el momento que escuches esto probablemente ya me haya ido, y ahora no hay nada más que hacer que gritar a la luna.
¡Esto no es justo! No trates de echarme la culpa. Mi amor por vos era a prueba de balas, pero vos fuiste quien  me disparó. Y maldita sea, apenas puedo decir tu nombre, así que trataré de escribirlo y llenar la birome con sangre del pozo. Pero no solo lo digas, deberías cantar mi nombre. Suponé que es una canción porque será tuya para siempre, y podemos cantarla de regreso a casa.

Bulletproof love - Pierce the Veil.

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